Hace poco más de un año, una amiga de toda la vida, Esther, nos dijo que se casaba. Vivió 14 años a Vilafranca y luego se fue a vivir a Castellón. Su madre es de Benassal y ella los findes los pasaba allí, así que el novio se lo echó allí. Por lo tanto tiene allí también su grupo de amigas. Así que propuso a 2 amigas de Benassal y 2 de Vilafranca ser sus damas de honor. Fuimos Celia y Paola de Benassal y Balma y yo de Vilafranca. Celia había bailado sevillanas y me propuso que como sorpresa a la boda, le podríamos bailar una sevillana. Así que desde el mes de enero hasta septiembre que fue la boda, quedamos todas las semanas para ensayar. Al final ya no era ni ensayo, era charla y cerveza… Nos conocíamos de vista se puede decir e hicimos mucha amistad. Últimamente estoy muy viajera y me dijo que me tenía que presentar a una amiga que estaba en modo viajero igual que yo. Así que habló con las dos y nos dió los teléfonos de una a la otra. Su amiga se llama Vanesa y es de Figueroles, estuvimos hablando por el WhatsApp de viajes, de donde nos gustaría ir, de donde habíamos ido… Me cayó muy bien y si, estaba en modo viajero total, je, je, je. Un día Celia dijo que teníamos que hacer algo las 3 cuando coincidiéramos y se dió el caso para la feria de Onda. Quedamos para un tardeo. La sensación, al menos para mi, fue que nos conocíamos de toda la vida. Hablamos, hicimos cervecitas y bailamos, pasamos una tarde la mar de entretenida. Vanesa comentó que a principio de año había pensado en hacer una escapada. Pero se quedó ahí porque justo esta semana la echaban de la faena donde estaba. Para final del año pasado, volvimos a quedar un día para comer las 3. Ya habíamos hablado por WhatsApp que Vanesa había pensado en ir a Madrid, porque pensaba ir sola y es un sitio que se conoce. Me preguntó si quería ir y la duda ofende, por supuesto que me apunté. El día que quedamos para comer, Celia llegaba tarde, así que quedamos Vanesa y yo más pronto y nos pusimos a mirar qué podríamos hacer, ver, donde ir… Más o menos decidimos por encima de ir al musical de Anastasia, a ver el circo del sol y pasar el sábado en Toledo, ya que a Madrid ya habíamos estado las dos, por ir a un sitio donde no habíamos estado ninguna de las dos. La cosa quedó así a la espera de que a ella la reubicaran al trabajo nuevo que ya tenía y yo a que mi jefe me confirmara también las vacaciones. Teníamos varias fechas barajadas en las que Vanesa trabajaba de mañana, para poder irnos un viernes cuando ella saliera de trabajar. Al final elegimos el finde que nos venía mejor para ver al circo del sol y este finde era del 31 de enero al 2 de febrero. Así que cuando lo tuvimos confirmado, recuerdo que fue el día antes de nochebuena, compramos ya todo. Cada una se encargó de comprar una cosa. Pero… cuando fuimos a comprar las entradas para el circo del sol, resulta que no era a Madrid, que era a Vitoria… Por lo que finalmente elegimos un teatro, se infiel y no mires con quién, de Josema Yuste y Teté Delgado. Pues compramos, tren de Valencia a Madrid, ya que no nos cuadraba la hora para coger el ave desde Castellón. Nos costó 45,30€ a cada una. El de vuelta sí que era a Castellón y nos costó 56,50€. El musical de Anastasia 74,52€. Todos los precios los voy a poner por persona. El tren de ida a Toledo 11,10€ y el de vuelta lo mismo. El teatro 33€.
Viernes, 31 de enero de 2020:
Habíamos quedado a la estación de Castellón a las 15.45h. Yo salí a las 14h de Vilafranca, me traían mis padres porque iban a pasar el finde a Castellón. Vanesa salía de trabajar e iba directa. Llegamos las 2 a las 15.30h, así que tiempo de saludarnos y nos fuimos corriendo a comprar el billete del tren cercanías para ir hasta Valencia. Nos costó unos 6€ a cada una. Pudimos coger el de las 15.40h, así íbamos más descansadas. Llegamos a Valencia a las 17h. Llegamos a la estación del Nord y cogimos un taxi para ir hasta la estación de Joaquín Sorolla, que es donde nos salía el Ave. Nos costó unos 10 minutos llegar y el Ave salía a las 18.10h. Así que aún nos dió tiempo a hacer una cervecita express. Llegamos a Madrid a las 20h en la estación de Atocha. Cogimos un taxi y nos fuimos hacia el hostal. Nos alojábamos en el Hostal uencarral. Al lado de la Gran Vía. El hostal nos costó 99€ a cada una 2 noches. Dejamos las maletas y deprisa y corriendo nos fuimos a cenar porque a las 22h era el musical. Cenamos enfrente de donde era el musical a un bar de tapas, muy bien y muy rápido.
El musical duró hasta la 1 y poco, con un descanso de 20 min. Estuvo muy bien, nos gustó a las 2. Al salir ya nos fuimos a dormir porque al día siguiente teníamos que madrugar para coger el tren. Aun así, estuvimos una hora hablando antes de dormirnos.
Sábado, 1 de febrero de 2020:
Nos levantamos pronto, a las 7. Así a las 8 ya estábamos preparadas. Cogimos un taxi y nos fuimos a la estación de Atocha para coger el tren para Toledo. Todos los taxis de la estación al hostal y del hostal a la estación nos costaban de 10€ a 12€. El tren salía a las 8.50h. Como llegamos pronto, aún nos dió tiempo a desayunar a la estación. Llegamos a Toledo a las 9.30h. Íbamos un poco perdidas porque habíamos mirado que ver yendo en tren. Queríamos coger un taxi para subir porque de la estación al centro estábamos a media hora caminando, pero al salir de la estación vimos un autobús que ponía que te llevaba gratis hasta el centro. Fuimos a preguntar y nos dijeron que el autobús te llevaba al centro y luego a hacer una foto donde se veía todo Toledo. A parte vendían packs de visitas guiadas etc. Así que decidimos coger uno de los packs. Cogimos el de 23€, que entraba un todo. Visita a la Sinagoga, al monasterio, a la iglesia, a la Catedral y una visita guiada por el centro. El autobús nos dejaba a la parte baja, donde cogías unas escaleras mecánicas y te subían a la parte de arriba de Toledo. Primero fuimos a dar la vuelta por nuestra cuenta.
Nos pensábamos que todas las entradas que teníamos entraban a la visita guiada y no fuimos a ver nada. Pero por si acaso, fuimos a decir a la oficina de turismo, la hora que haríamos la visita guiada. Total que la visita guiada la queríamos hacer a las 12.30, pero nos dijeron que a la de esa hora no entraba la catedral, que teníamos que coger la de las 14.30h. También nos dijo, que excepto la catedral, todas las otras entradas teníamos que ir a verlo todo por nuestra cuenta. Suerte que se nos ocurrió ir a preguntar, si no, no vemos nada. Pues primero fuimos a ver el monasterio de San Juan de los Reyes.
Luego fuimos a ver la Sinagoga de Santa María la Blanca.
Por último vimos la iglesia de Santo Tomé. Luego queríamos ir a comer a una terraza de un hotel que se ve todo Toledo, pero estaba cerrada, así que nos fuimos a un restaurante casero que comimos super bien. Antes de la visita guiada tomamos un café un la plaza de Zocodover, ya que la visita empezaba allí al lado. La visita duró sobre una hora.
Terminaba a la catedral y a las 16.30h salía el autobús para ver la panorámica de Toledo. Así que fuimos yendo para allí. La vista realmente era espectacular.
El autobús te dejaba a la estación y nuestro tren salía a las 17.25h. Así que tiempo de llegar y subir ya al tren. Llegamos a Madrid a las 18h. Como el teatro era a las 20h, decidimos ir a tomar algo antes. Cogimos un taxi y le dijimos que nos dejara directamente al teatro y Vanesa le preguntó si por allí se podía tomar alguna tapa. El taxista nos recomendó que fuéramos a la calle Ponzano, a 15 min del teatro, donde hay 72 bares de tapas. Así que allí le dijimos finalmente que nos parara. Fuimos a un par de bares a tomar unas cervecitas y unas tapas y ya nos fuimos para el teatro, que estaba al lado, la verdad, no eran 15 min ni de coña, estaba mucho más cerca. El teatro estuvo muy bien también, nos reímos mucho.
Se terminó sobre las 10.30h, así que volvimos a la calle Ponzano y cenamos. Hicimos unas tapas a un bar y luego fuimos a otro garito a echar un cubata. Se nos hicieron las 2. Yo estaba reventada, si no, nos hubiéramos quedado más rato. Pero bueno, estuvo bien igualmente. A lo tonto entre llegar, que cogimos un taxi, y hablar antes de dormir, nos acostamos más tarde de las 3.
Domingo, 2 de febrero de 2020:
Nos levantamos sobre las 9.30/10h, ya que a las 11h nos echaban ya de la habitación. A las 11 en punto salíamos de allí. Nos guardaron las maletas al hostal y nos dijeron que hasta las 20h las podíamos tener allí, así que genial. Primero fuimos a buscar un sitio para desayunar. Fuimos a una paralería cerca de la Gran Vía, la calle del Postigo de San Martín. Era una librería, La Central, que dentro tenía un barecito que se llama El Patio de la Central. Nos encantó el sitio y el desayuno, y nos pareció baratísimo. Tomamos lo de la foto y no llegó a 6€ cada una creo.
Mientras desayunábamos hicimos un planing de que ver. Al salir, fuimos a un punto de información para coger un mapa y marcamos las zonas donde ir según lo que habíamos elegido ver. Este día, ya que no teníamos ninguna prisa, nos desplazamos en metro. Nos compramos una tarjeta de 10 viajes entre las dos y nos costó sobre unos 10€. Lo primero que fuimos a ver fue la Puerta del Sol.
Plaza Mayor.
Como desayunamos tarde, para aprovechar el día decidimos ya no comer. Pero fuimos al mercado de San Miguel y no nos pudimos resistir a hacer un vermut. Vanesa se hizo una mini hamburguesa de color rosa de surimi, caviar y algo más acompañada con patatitas fritas. Molaba terrible y dijo que estaba muy buena. Yo me hice dos tostaditas, una de pulpo y otra de foie.
Luego nos fuimos a pasear por el rastro de Madrid. Después al Palacio de Liria, pero no se podía entrar, así que lo vimos por fuera.
Templo de Debod.
Palacio Real.
Fuente de Cibeles.
Puerta de Alcalá.
Para finalizar el viaje, nos fuimos al parque de El Retiro. Queríamos subir en barquita y dar una vuelta, pero nos entretuvimos haciendo una cervecita y una tapa y se hizo tarde.
Volvimos al hostal a por las maletas y nos dimos cuenta de que íbamos a contrarreloj, nos habíamos empanado, habíamos calculado mal el tiempo y empezamos a ir un poco a gas. Llegamos al hostal, no iba el ascensor, tuve que subir yo a pie 3 pisos y bajar con las 2 maletas corriendo por ahí. Cogimos un taxi porque con el metro no llegábamos ni de coña… El taxista nos pegó bronca por cogerlo en dirección contraria a la estación (no lo sabíamos y con la prisa que teníamos como para entretenernos estábamos). Cuando le dijimos a las 19.20h, que el tren nos salía a 19.40h, se echó las manos a la cabeza y nos pegó otra media bronca, que nos complicamos mucho la vida. Se dió prisa y llegamos a tiempo. Corriendo por esa estación. Cuando entramos al tren, miré el reloj y nos habían sobrado no llegaba a 5 minutos, y el tren salió a la hora en punto. Qué sudada. Llegamos a Castellón a las 22.30h y fin del trayecto.
Un finde corto pero intenso. Como habéis visto super completo, valorado en unos 460€ más o menos absolutamente con todo incluído lo nombrado.
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